¿Alguna duda?
La descalcificación del agua consiste en la eliminación del calcio y el magnesio de los circuitos y equipos en los que podrían generar problemas.
Para conseguirlo, se emplean resinas que vienen embotelladas y que son regeneradas cada cierto tiempo gracias a soluciones cargadas de cloruro y sodio.
En el caso del tratamiento de aguas en aplicaciones industriales, esta técnica no será suficiente, ya que no elimina gases disueltos, carbonatos, el sílice ni otro tipo de iones. Por ello, en algunos casos, será necesario complementar el tratamiento con otras técnicas adicionales, como la descarbonatación o la desmineralización.
En Desam asesoramos a nuestros clientes y les ofrecemos un servicio adaptado a sus necesidades.